
De nuevo la mala suerte se cebó ayer en Bornos con la
Unión Deportiva Tesorillo y como le pasara hace siete días ante el
Isla Cristina (y anteriormente contra
Rosal, Conil, Xerez B, e incluso con la
Roteña), en los últimos instantes dejó escapar una victoria merecida aunque esta vez mucha culpa de lo ocurrido la tiene el trencilla onubense de origen vasco
Garikoitz Larrauri, que dio validez al
1-1 de los locales cuando
Reina estaba en claro fuera de juego, libre de marca y justo bajo palos en una falta sacada desde el centro del campo.

Hasta ese instante los de
Manolín Sánchez tenían controlado el partido y más cuando
Fiera clavó el balón en la escuadra de
Jairo al saque magistral de una falta (25’) sorteando la barrera por alto, acción que estuvo a punto de repetirse cinco minutos después, pero esta vez el meta local sacó bien la mano para evitar el tanto.
Tras el descanso, el cuadro de
Javier Palos estiró las líneas en busca del empate mientras que los de La Era se defendía con corrección y buscando una contra matadora.
El Bornense tiró de oficio, de campo (pequeño) y de público, y a base de pelotazos fue metiendo al
Tesorillo atrás.
En uno de éstos, el auxiliar señaló fuera de juego, lo que enfureció a los seguidores locales que incluso,
algunos de ellos, saltaron al terreno de juego a increpar al linier, lo que hizo que el partido se interrumpiese unos instantes.

En los últimos minutos, el
Bornense apretó y llegó la jugada polémica. Una falta desde el centro del campo sin peligro le cayó a
Reina, que estaba solo junto a
Miguel Rivas, para hacer el
1-1 pese a las protestas tesorilleras.
Era el
88’ y no hubo tiempo para más.
El próximo partido de
la Unión será en casa ante el todopoderoso
Arcos, en lo que será la vuelta de
Sotelo a La Era.
El choque está previsto para las 12.00 horas.
Seky vuelve tras su sanción y
Juanan, Quique, Steven y
Pedro están con 4 amarillas y de ver otra no estarían en el Nuevo Mirador el 1 de marzo.



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